Arkaine era un guerrero que vivió en algún momento antes de los acontecimientos de Diablo. Él es conocido por haber sido el primer mortal en cambiar el rumbo de la Guerra del Pecado en favor de las fuerzas de la Luz, persiguiendo a las legiones demoníacas y enviándolas de vuelta a los infiernos abrasadores.
Arkaine poseía una armadura mágica llamada "Valor", que, antes de su muerte, la escondió dentro de las catacumbas debajo de Tristán. Su escondite estaba en la Sala del Fuego (donde "Valor" descansaba al fondo de esta sala). Ante la puerta estaba el pedestal de sangre y la puerta permanecería bloqueada hasta que una persona (el "Héroe de la Luz") colocara las tres piedras de sangre encima del pedestal.
En la misión de Diablo I, "Valor Arkaine", el jugador debe recuperar las tres piedras de sangre, una que se encuentra en la Puerta de la Sangre y las demás en dos salas laterales, así como también superar varios demonios, para adquirir el objeto "Valor Arkaine".